Durante tres días, las diferentes entidades de la economía social y personal técnico de los municipios han podido compartir espacios de reflexión y asesoramiento y establecer contactos entre ellas
La Muestra de Economía Social y Solidaria de Castelló ha cerrado su segunda edición donde se ha consolidado como un espacio anual de referencia para el sector. En este sentido, el diputado de Promoción Económica, Ocupación y Relaciones Internacionales, Pau Ferrando, ha valorado su impacto en las entidades y personas participantes, «que encuentran una oportunidad única para establecer redes y reflexionar colectivamente sobre el presente y las posibilidades de futuro de la economía social y solidaria de nuestros pueblos».
El acto ha sido organizado por la Diputación de Castelló y ha contado con la colaboración de varias entidades del sector y de la Dirección General de Emprendimiento y Cooperativismo de la Generalitat.
La muestra se inauguró el pasado viernes 14 de octubre con una ponencia sobre "Economía Social y Solidaria: Democracia económica y transición ecosocial" a cargo de Ivan Miró i Acedo, de la emblemática cooperativa catalana La Ciudad Invisible.
Durante el sábado 15 tuvo lugar la Feria de entidades, donde diferentes proyectos de la Economía Social de la provincia pudieron darse a conocer, mostrar su trabajo y establecer contactos con otros proyectos.
Además, la Feria contó con una área de asesoramiento a personas emprendedoras, a cargo de las principales entidades representativas del sector, como Fevecta, Aesal o REAS-PV, y otros agentes dedicados a la promoción del emprendimiento, como los Cedes de la Diputación, el Centro de Emprendimiento Social La Nidada de Benlloc o el Centro de Desarrollo Rural del Alt Maestrat.
Durante la jornada, se celebraron tres tablas de debate sobre diferentes retos sociales y medioambientales actuales: el cooperativismo de plataforma, la energía, los feminismos y las migraciones. En estas tres mesas, se reflexionó sobre las potencialidades de la economía social y solidaria para abordar estos retos desde la construcción de otro modelo económico centrado en las necesidades humanas y respetuoso con el territorio. En todas ellas, se incluyó la mirada desde el ámbito rural y la necesidad de revertir el despoblamiento.
Para acabar, lunes 17 se celebró un Foro de Economía Social dirigido a personal técnico de los municipios, donde se trataron temas como la contratación pública responsable, la colaboración pública-cooperativa en ámbitos como la energía o la vivienda, la gestión comunitaria de servicios e infraestructuras públicas por parte del tejido asociativo, y otros ejemplos de buenas prácticas inspiradoras de diferentes municipios.